El pasado 14 de abril le rendimos un homenaje a la Visita Dadá de 1921, primer hito en el que se utilizaba el caminar como un desplazamiento del valor simbólico del arte desde el objeto al espacio. Tres años después de la Visita Dadá, en el mes de mayo de 1924, parte del grupo surrealista (André Bretón, Max Morise, Roger Vitrac y Louis Aragon) organizó otro recorrido por el espacio, una deambulación por campo abierto en Francia. Un recorrido errático por un territorio natural para explorar los límites entre la vida consciente y la vida soñada. Este recorrido será el paso definitivo de Dadá al Surrealismo. El surrealismo utilizaba el andar como el acto más natural y cotidiano de la conducta humana, como un medio a través del cual indagar y descubrir.
A diferencia de la excursión dadaísta, el escenario de la acción no fue la ciudad, sino la naturaleza, en un viaje sin finalidad ni objetivo. El Deambulear surrealista consiste en elegir al azar un punto en el mapa e iniciar un camino hacia allí sin previa organización. Nosotros hemos hecho ese ejercicio como ven en el vídeo y les invitamos el próximo domingo 29 de a hacer el recorrido mayo hasta el punto elegido por azar, en este caso, el Barranco de Herques en Fasnia.